19730216
Niza, 16 de febrero de 1973
Queridos todos:
¿Qué pasa en Niza? Pasó anteayer Walter Kaiser, amabilísimo, a buscarnos. Almuerzo en Mougins: el [bar] nos gustó mucho. Invitados: el príncipe y la princesa Poniatowski. Él, medio americano, muy sencillo. Madame Margerie, ex-embajadora de Francia, especialista en la poesía desde Rilke en adelante. Se lanzó sobre mí, y no me soltó. ¡No quedé mal! Las horas fueron gratas y nada pesadas.
Otra soirée, no del todo molesta: en casa de Jacobo Muchnik. Pasó por Niza la señora (viuda) de Seix. Conocimos allí a un biólogo argentino, García Romeu, no profesor, sino investigador en la “Recherche scientifique”. Hombre de calidad.
Entre los profesores de la Universidad, hay una señora muy fina, Madame Couland, agraciada, profundamente adicta a… Aire Nuestro. (Autora de un estudio de Homenaje). Esta tarde vuelve Bélamich. Se hace querer. Es buenísima persona. Tema central de su vida: Federico. ¡Muy bien!
Y a todo esto, he recibido una carta colectiva de Montealegre. La idea de que yo había nacido allí removió al pueblo. Enviaré una fotocopia a Anita, que piensa especializarse en ese autor. (¡La adoro! Dicho en voz baja).
Vimos el Museo Matisse. Y el Museo Picasso. Hay muchas cosas que ver en esta villa. Abrazos. Os queremos.
Jorge
Tus fotos, Anita, espléndidas de movimiento; de naturalidad: recuerdo precioso que hemos mirado mucho el Abué y yo. Esta mañana ha caído un poquito de nieve: una broma ligera. Tenemos puestas de sol casi tan bonitas como en el Cape. Steve las gozaría mucho (con su puro). Abrazos para los tres y caricias para las dos.
Irene