19690226
Málaga, 26 de febrero de 1969
Queridos:
Respondo a tu carta, Teresa; nos llegó al mediodía. Lleváis una vida muy interesante, llena de amistades y de espectáculos. Sí, digno de verse el hindú-español Panikkar. Saludad a don Vicente Llorens; me alegró mucho saber que coincidiremos en Cambridge. De Claudie no sabéis nada. Nosotros hemos tenido la profunda alegría —sí alegría— de recibir carta suya. Responde a la mía de Génova. Quizá se haya perdido alguna suya. La carta anterior era del 28 de octubre. Está lleno de quehaceres y escrituras. ¡Habrá libro! Todo ello me alegra profundamente.
Aquí ha habido unas “Jornadas de Valladolid”. Vinieron siete pintores jóvenes; están aquí en exposición sus cuadros. Y con ellos estaba Francisco Pino. Vinieron en comisión a visitarme. Soy ya el venerado Diplodocus de “Valladolid la rica”, como dijo el romance. Discretos en pintura; extremistas en ideales políticos. No faltó el barbudo. Simpáticos, prometedores. ¡Valladolid cambia!
Ayer escribí una recomendación solicitada por amigos españoles de Austin, Texas; quieren llevar a Cardona como chairman. ¡Extraña historia!
Tiempo desapacible, lluvioso, pero apenas frío; los peores días del año. Hemos tenido obreros en casa; nos han puesto un toldo en el balcón; han arreglado unas grietas en una pared.
Yo trabajo como de costumbre. Irene también. Adjunto una fotografía. ¿Y la recomendación de Claude Esteban?
Abrazos besos. Vuestro,
Jorge
(Cuando hay sol y se baja, la luz es preciosa, muy matissiana… rayas blancas y verdes).